Las pensiones son hoy en día una de las principales preocupaciones de chilenos y chilenas. Es debido a esto que cada año las personas buscan tomar medidas adicionales a sus cotizaciones mensuales obligatorias. 

Una opción que se considera cada vez más viable hoy en día son los APV. Esta clase de ahorros para la pensión ayudan a que, en un futuro, las personas puedan jubilarse más tranquilas y con la mayor cantidad de dinero posible. 

En la siguiente nota te comentaremos sobre el APV, qué es y cómo puedes aprovecharlo para mejorar tu jubilación. 

 

Qué es el APV 

El APV o Ahorro Previsional Voluntario, es la posibilidad de hacer una contribución adicional a tus cotizaciones obligatorias, depositando en una cuenta de ahorro, con el fin de aumentar tu pensión. En palabras más simples, es aportar voluntariamente más dinero para tu jubilación.  

Puedes contratar un APV sin importar si eres trabajador dependiente o independiente, siempre y cuando estés cotizando en alguna AFP.  

Esta modalidad de ahorro significa más contribuciones para tu jubilación, y también abre la posibilidad a distintos e importantes beneficios. 

 

Cómo funciona el ahorro previsional voluntario 

Este sistema de ahorro para tu pensión funciona con aportes voluntarios que realizas a tu cuenta, y puedes contratarlo en distintas entidades, como compañías de seguros, bancos, AFP, entre otras.  

Puedes aportar dinero a tus ahorros de dos formas distintas: 

  1. Aportes mensuales: Puedes hacerlo a través de descuento por planilla, donde mes a mes se te descuenta de tu sueldo el mondo acordado previamente con tu empleador. Este descuento tiene un tope de 50UF mensuales
  1. Aportes directos: En esta modalidad puedes aportar directamente a la institución donde estás ahorrando cuando quieras y el monto que quieras, una ventaja de esta modalidad es que puedes aprovechar si recibes bonos o aguinaldos para aumentar tu ahorro. Sin embargo, debes considerar que el máximo monto anual para obtener beneficios tributarios es de 600UF. 

Es importante tener en cuenta que debes consultar con la institución con la que contrataste el APV los detalles de estas modalidades. Debes tener la tranquilidad que, en general, ambas modalidades no son excluyentes una de otra, y que puedes cambiar de tipo de aporte cuando quieras.  

Por otra parte, no debes olvidar que existen costos asociados a la contratación de esta clase de productos con ahorro, ya sean las comisiones que cobra la institución, la prima del seguro, entre otras opciones.  

 

Distintos regímenes de APV y sus beneficios 

Algo muy importante para elegir tu APV es informarte muy bien sobre los dos regímenes tributarios distintos a los que puedes acceder, en tanto ambos poseen distintos beneficios tributarios.  

Te explicamos brevemente las ventajas de cada uno para que puedas elegir el que más te conviene: 

Régimen A:  

En el régimen A, el Estado complementa tus aportes mediante una bonificación del 15% de tus aportes anuales. Por ejemplo, si durante un año ahorraste $1.000.000, el Estado te entregará $150.000.  

Régimen B:  

El beneficio es una disminución en el pago de impuestos. En este tipo de ahorro los aportes se rebajan de tu sueldo imponible, lo que significa un menor pago de impuesto a la renta. El monto del beneficio en este tipo de ahorro depende del sueldo que el contratante reciba mensualmente. 

¿Por qué contratar un APV? 

Ya te hemos comentado alguno de los beneficios tributarios para ahorrar que te entrega el poseer un APV, sin embargo, existen aún más ventajas de contar con este producto: 

  1. Aumentas tu pensión: Es el principal objetivo de contratar un APV, si eres constante en tu ahorro verás importantes mejoras en el monto total de tu jubilación.  
    Por ejemplo,una mujer que haya contratado un APV a sus 38 años, puede aumentar su pensión en más de un 50%.
     
  1. Liquidez: Los ahorros del APV son tuyos. Si ocurre una emergencia donde necesitas liquidez para afrontar algún gasto, puedes retirar tus ahorros o parte de ellos.  
    Sin embargo, esto no es lo ideal, pues estarás perdiendo parte de tu ganancia para tu pensión.  
     
  1. Eliminar lagunas previsionales: Este fenómeno ocurre por periodos donde no cotizaste a lo largo de tu vida, y es de las principales causas de las bajas pensiones.  
    Con un APV y su ahorro voluntario puedes compensar este tiempo y aumentar el monto total de tu pensión.  

 

¿Dónde contratar un APV? Diferencias entre las opciones 

Si te interesa contratar un APV tienes muchas opciones para realizarlo. siempre y cuando sea una institución autorizada, puedes abrir este sistema de ahorro con instituciones como un banco, una administradora de fondos de pensiones o una aseguradora.  

Dependiendo con qué tipo de institución contrates tendrás distintas características en tu APV, lo cual podría influir en lo que suceda con tu dinero (tanto del ahorro como del seguro en caso de tenerlo) una vez que ya no estés.  

 

Beneficios de contratar con una aseguradora 

  • Un APV en un seguro es indemnizatorio: Esto significa que, si llegas a fallecer, el capital asegurado irá directamente a los beneficiarios de pensión, es decir, que tu ahorro puede ser retirado inmediatamente por los beneficiarios, o bien puede ser enviado a sus cuentas de AFP.  
  • Flexibilidad en retiros: El APV permite disponer de tu dinero cuando lo necesites, incluso antes de tu jubilación. Puedes rescatarlo cuando sea necesario, teniendo presente que perderás la bonificación de tu ahorro.  
  • La protección da tranquilidad: En BICE VIDA te otorgamos cobertura ante fallecimiento hasta los 99 años.  

Si decides un Seguro con APV de BICE VIDA estarás protegiendo a tu familia mientras ahorras para tu pensión en una empresa con años de experiencia y calificación AA+, la mejor del mercado. 

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